¿Sabe Ud. de seguro que irá al cielo algún día? ¡Dios escribió la Biblia para que Ud. pueda saberlo! 1 Juan 5:13 dice, "Estas cosas os he escrito a vosotros... para que sepáis que teneis vida eterna..."

Aquí Está Como Ud. Puede Saberlo:

• Primero, debemos reconocer que todos hemos pecado. Romanos 3:23 dice, "Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios."
• Segundo, la pena por nuestros pecados es muerte y separación eterna de Dios. La Biblia dice en Romanos 6:23, "Porque la paga del pecado es muerte." Ezequiel 18:20 dice, "El alma que pecare, esa morirá." (Vea Apocalípsis 20:14, 21:8 también)
• Tercero, Jesús pagó por nuestra pena de muerte. Dios mandó a Jesús a sufrir y morir en la cruz en nuestro lugar. Romanos 5:8 dice, "Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros." ¡El fue sepultado y resucitó de la tumba y El vive por siempre!
• Cuarto, Dios te ama y quiere salvarte de tus pecados. "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna." Juan 3:16

Sin embargo, cada persona debe aceptar a Cristo personalmente para ser salvo de sus pecados. Jesús dijo, "Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mi." Juan 14:6, "Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos." Hechos 4:12

No hay otro camino. La salvación no es a través de ser buenos, haciendo obras, manteniendo un código moral, siendo religiosos o ningún otro esfuerzo propio. La salvación es solemente a través del Señor Jesucristo y su obra terminada en la cruz del calvario. Solamente su sangre derramada puede lavar nuestros pecados (Vea Romanos 5:9; Efesios 1:7)

¿Como puede Ud. aceptar a Cristo como su Salvador?

Romanos 10:13 nos dice, "Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será Salvo."

Juan 1:12 dice, "Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios."

Ore, creyendo desde su corazón, "Señor yo reconozco que soy pecador y merezco tu castigo. Perdoname por mis pecados. Yo ahora confío en Jesucristo como mi salvador personal, y acudo a El como mi Señor para que me salve. Yo creo que El murió por mi en la cruz y solo su sangre puede lavarme de mis pecados. Te pido por el regalo de Salvación, en el Nombre de Jesús, Amén." (...mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.") Romanos 6:23b